Basta de hablar de antifútbol

Por Diego Raimundo.

Que el fútbol evoluciona no es un descubrimiento ni mucho menos. Lo que nunca va a cambiar en este hermoso deporte son las discusiones sobre tácticas o la manera de jugar uno o tal equipo. Lo que sí resulta realmente inadmisible es que todavía exista gente que califique a Estudiantes que practica “antifútbol”. Pasaron 40 años desde la obtención de la Copa Intercontinental y aún hay gente (incluyo entrenadores, jugadores, periodistas y público) que no soportan los buenos resultados de nuestra institución y nos castigan con ese mote.

Basta de antonimias (se denomina así a todo conflicto entre ideas, proposiciones, actitudes etc.). Ya no se puede discutir todo lo que logró Estudiantes desde el año 1968 hasta esta parte, no se puede ocultar y mucho menos querer tapar los logros con frases como: “pero no juegan bonito”. Por favor… Ni los ultra defensivos ni los líricos del fútbol pueden negar que el resultado positivo sea un bálsamo para el progreso colectivo. Entonces que me hablan de antifútbol, Estudiantes es y será un ganador desde la Primera hasta la última categoría.

Todo esta introducción viene a colación de la manera en cómo se fue protestando San Lorenzo del Country. Despotricando de algunas cuestiones que acontecieron en un par de partidos de Liga Metropolitana el pasado domingo. Claro para la gente de Boedo que los equipos albirrojos hayan obtenido 15 puntos es un duro cachetazo considerando que ellos (obtuvieron 3 puntos solamente) se “sienten” superiores a varios clubes del fútbol argentino. El pensamiento de juzgarse más que el otro le impide ver la realidad futbolística o que en este caso existan equipos, como Estudiantes, que ya no son inferiores ante nadie. ¿Entonces que sucede? Automáticamente la bronca de muchos lleva a gritar a los cuatro vientos “estos siempre igual, ya le enseñan el antifútbol a los más chicos…”

Para muchos son pavadas, para otros no. Continuar con las discusiones es un absurdo. Las antinomias hay que desterrarlas. Reafirmar a diario que Estudiantes es un club ganador y lo será por siempre puede resultar pesado pero resulta ¿de qué antifútbol hablas?

Mientras existan este tipo de calificativos, nadie puede negar que se agiganta el ego y da más ganas de obtener éxitos en cada una de las competencias que afronte el club.