Por Diego Raimundo
El candelero futbolístico está envuelto en infinidad de discusiones sobre la manera de jugar, plantear un encuentro y por supuesto jugar el mismo. Y entre esas discusiones saltan a la luz los diferentes sistemas tácticos que para muchos sólo son aplicables a partir de las individualidades y para otros va en consecuencia de la aplicación y el entendimiento de cada futbolista. En este caso tras haberse jugado una doble jornada de fútbol en el Country quedaron bien definidos los roles o mejor dicho como los jugadores de Estudiantes cuentan con la “esencia bien marcada” más allá de todas dificultades que le propuso Arsenal.
Realmente da gusto ver a los pibes jugar en la cancha de once porque se sienten “grandes” en el terreno de sus ídolos. Pero más interesante es observar cómo desde los chicos de 8 hasta los 13 años se saben desenvolver de acuerdo a las dificultas y cómo responden a las diferentes variantes tácticas. Fue auspicioso ver, dejando de lado los resultados que se registraron (dos empates en ocho juegos) como los pibes –a través de las indicaciones que llegaban desde el banco de relevos- aplicaban los cambios tácticos y a partir de ello burlaron el amarretismo que presentó Arsenal en todos los partidos jugados (4-4-2 bien marcados y muy pocas veces propuso jugar).
Pero no sólo la aplicación táctica 4-4-2 flexible al 4-3-1-2 sirvió para que Estudiantes demuestre superioridad ante su rival y sino que al mismo tiempo para que los jugadores se amolden a los diferentes puestos del campo. ¿Cómo se entiende? Por ejemplo hubo jugadores que arrancaron como enganche o enlace y a partir de los cambios se acomodaron a la función de volante por la banda, a fin de que el equipo quede bien balanceado. O estuvieron aquellos que de volante externo se “unieron” a la zona de quita para formar un doble cinco.
En síntesis a que apuntamos en esta nota, a dejar bien reflejado que más de los resultados (el domingo fueron todos positivos) la propuesta de juego de Estudiantes y el entendimiento de los protagonistas a los dibujos tácticos, hace que el fútbol que despliega el Pincha en la cancha “grande” sea admirable, que la “esencia táctica” esté bien definida, situación que a largo plazo llevará, no caben dudas, a que los resultados serán más productivos que los que se han obtenido hasta ahora.
El candelero futbolístico está envuelto en infinidad de discusiones sobre la manera de jugar, plantear un encuentro y por supuesto jugar el mismo. Y entre esas discusiones saltan a la luz los diferentes sistemas tácticos que para muchos sólo son aplicables a partir de las individualidades y para otros va en consecuencia de la aplicación y el entendimiento de cada futbolista. En este caso tras haberse jugado una doble jornada de fútbol en el Country quedaron bien definidos los roles o mejor dicho como los jugadores de Estudiantes cuentan con la “esencia bien marcada” más allá de todas dificultades que le propuso Arsenal.
Realmente da gusto ver a los pibes jugar en la cancha de once porque se sienten “grandes” en el terreno de sus ídolos. Pero más interesante es observar cómo desde los chicos de 8 hasta los 13 años se saben desenvolver de acuerdo a las dificultas y cómo responden a las diferentes variantes tácticas. Fue auspicioso ver, dejando de lado los resultados que se registraron (dos empates en ocho juegos) como los pibes –a través de las indicaciones que llegaban desde el banco de relevos- aplicaban los cambios tácticos y a partir de ello burlaron el amarretismo que presentó Arsenal en todos los partidos jugados (4-4-2 bien marcados y muy pocas veces propuso jugar).
Pero no sólo la aplicación táctica 4-4-2 flexible al 4-3-1-2 sirvió para que Estudiantes demuestre superioridad ante su rival y sino que al mismo tiempo para que los jugadores se amolden a los diferentes puestos del campo. ¿Cómo se entiende? Por ejemplo hubo jugadores que arrancaron como enganche o enlace y a partir de los cambios se acomodaron a la función de volante por la banda, a fin de que el equipo quede bien balanceado. O estuvieron aquellos que de volante externo se “unieron” a la zona de quita para formar un doble cinco.
En síntesis a que apuntamos en esta nota, a dejar bien reflejado que más de los resultados (el domingo fueron todos positivos) la propuesta de juego de Estudiantes y el entendimiento de los protagonistas a los dibujos tácticos, hace que el fútbol que despliega el Pincha en la cancha “grande” sea admirable, que la “esencia táctica” esté bien definida, situación que a largo plazo llevará, no caben dudas, a que los resultados serán más productivos que los que se han obtenido hasta ahora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario